Blogia
Los Relatos de Ruben

Amor desamorado

Octavilla inversa

 

Ya no se encantarán mis ojos en tus ojos, ni se endulzará junto a ti mi pertinaz calvario.

Pero hacia donde vaya llevaré tu mirada y hacia donde camines tu portaras

mi dolor. Juntos rodeamos la ruta donde nuestro amor se forjara.

Fui tuyo, fuiste mía. Serás del que te ame; del dignatario

que corte en tu huerto lo que yo he sembrado. Más, –ahora–,

es la hora de partir; por ese calvario

de no serme; por el dolor.

Mi dura, –y fría–, hora.

 

Te ceñiste a la

pena, te agarraste al deseo

a hora del asalto y el beso; a un flaqueo

de la carne ardiendo como un faro al que con amor se recala

a través de una pared de sombra; ¡Cielos!

Todo en ti resulto naufragio;

un turbio deseo

alzado.

** Estructura, diseño y diagramación: Rubula **

0 comentarios