Ser maldito

No te diste cuenta ¿verdad? Fue la noche quien no se detuvo cuando te observaba en silencio; no detuvo sus furitivas horas liberando el alma de mi cuerpo. Observé tu conducta, como aquellos que lo hacen con los paisajes tristes, o las obras frías y ¿sábes? Fueron tus ojos quienes dieron con la repuesta correcta: –hijo de puta, date de pleno con esa muralla amortajada que cubre de lleno tu ser maldito.

 

-- oo --

 

** Estructura, diseño y diagramación: Rubula **